- Preparar el vehículo: Da igual si viajas de punta a punta de España o recorres algún país extranjero. Lo más importante a la hora de realizar un viaje es asegurar que el coche se encuentra en buen estado y, por lo tanto, que el viaje es completamente seguro.
- Dejar todo listo: Comprueba que has empaquetado todo, que has dejado la casa bajo control y que te has acordado de pedir a amigos o familiares que recojan el correo y den de comer al perro. Todo esto evita hacer llamadas durante el trayecto o tener que dar la vuelta. Una lista también puede ayudar.
- Planificar la ruta: Un poco de planificación sobre el tiempo de conducción, las carreteras que hay que coger y las posibles paradas que hay que hacer reducirán considerablemente el estrés con antelación.
- Estar descansado: Un viaje largo es agotador, sobre todo en carreteras desconocidas o con tráfico denso. Es fundamental que el conductor haya descansado plenamente para mantenerse activo durante el viaje y consciente de todo lo que ocurre alrededor. Ir acompañado por unos pasajeros descansados también ayuda a reducir el estrés y el nerviosismo en el coche.
- Controlar el equipaje: Piensa bien lo que vas a llevar. Cargar con una sombrilla de playa puede parecer importante para evitar largas exposiciones al sol, pero si sobresale del área de pasajeros del vehículo tal vez merezca la pena comprar una nueva en el destino.
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