- 22 enero, 2021
- By: Gruas Bretones
- in: Conducción en invierno
¿Sabías que la mayoría de accidentes de tráfico se producen durante los meses de invierno? Esto se debe en gran medida a que conducir con hielo o nieve no es para nada fácil y pueden provocar situaciones realmente peligrosas.
Saber conducir en condiciones gélidas es fundamental si queremos evitar accidentes o quedarnos tirados en la carretera, sobre todo si vivimos en zonas con inviernos duros.
No todo el mundo conoce las técnicas o trucos de conducción en condiciones adversas, ni siquiera aquellos que viven en zonas de clima frío, por ello es conveniente recordarlas para minimizar los riesgos.
Una cuestión que pocos conductores saben, por ejemplo, es que por debajo de los 7ºC los neumáticos convencionales comienzan a perder sus prestaciones. Es debido a esta cuestión que existen neumáticos especiales para el invierno, ¿sabías esto?
Prevenir es siempre la mejor forma de evitar accidentes o situaciones de peligro, este es el primer consejo que debemos tener en cuenta.
Acondiciona tu automóvil y prepárate para el duro invierno
Lo más importante ante el frío y sus consecuencias en la carretera, es tener acondicionado el coche y estar preparado para cualquier adversidad. A continuación, te indicamos una serie de directrices a seguir para para combatir el duro invierno y los riesgos que conlleva conducir con hielo o nieve:
- Antes de que lleguen las primeras nieves, realiza un revisión a tu coche y asegúrate de que todo funcione correctamente. Lo último que queremos es que nuestro coche se averíe o falle al conducir sobre hielo. Así pues, revisar el estado de la batería, nivel de líquidos, neumáticos, frenos, limpiaparabrisas y luces, sobre todo, es fundamental.
- Consigue unos neumáticos de invierno o adquiere unos nuevos en el caso de que los actuales estén desgastados. Conducir con hielo en la calzada con unos neumáticos en mal estado es un peligro ya que la posibilidad de deslizar es mucho más elevada. Los neumáticos de invierno están diseñados con el fin de garantizar una mayor adherencia sobre superficies complicadas.
- Revisa siempre la presión de los neumáticos durante los meses del invierno. Debido al frío, la presión de los neumáticos desciende naturalmente, si estos no están inflados completamente pueden tener un tiempo de reacción más lento, lo que aumenta el peligro al conducir con hielo. Acércate cada dos o tres semanas a la gasolinera o taller más cercano para hacerlo.
- Compra cadenas para la nieve. Las cadenas están diseñadas para dar mayor tracción a los neumáticos de forma que sea más seguro conducir con nieve por lo que te conviene adquirirlas y siempre llevarlas en el maletero.
- Trata de tener la mejor visibilidad posible, para quitar el hielo del cristal utiliza una rasqueta. Un truco casero muy bueno es usar una patata. Córtala por la mitad y frota la patata por fuera y por dentro del cristal, así evitarás el agua por fuera y que se empañe el cristal por dentro. Dirige también las salidas de aire hacia el parabrisas y ventanillas.