Las grúas son para nuestra empresa un elemento vital para la carga y descarga de la mercancía en los puertos. Se trata de maquinaria de precisión, pero que está sometida a riesgos de colisiones con los buques, problemas climatológicos o fallos derivados de un mantenimiento deficiente.
Un accidente común en los puertos es el colapso de grúas. Este accidente portuario suele darse por el choque de algún barco con la grúa al perder el control, por distintos motivos. Las consecuencias de este tipo de accidentes pueden ser:
– Costes por reparaciones: la reparación o reemplazo tanto de la propia grúa como del equipamiento portuario sobre el que caiga, incluidos los barcos amarrados.
– Pérdida de operatividad: un accidente de este tipo inutilizará el espacio de atraque durante el tiempo que duren las reparaciones.
– Coste humano: supone un riesgo de primer nivel para los profesionales que trabajan en el puerto.
Prevención de accidentes
Es fundamental la coordinación de autoridad portuaria, pilotos, remolcadores y personal de amarre. La falta de comunicación y la preparación insuficiente son las causas principales del error humano que puede terminar en accidente. Otro factor importante es vigilar el posicionamiento de las grúas, excluyendo las posiciones más sensibles al impacto con los barcos. Finalmente, hay que vigilar el tiempo, ya que los fenómenos atmosféricos pueden provocar también este tipo de accidentes.
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