- 24 septiembre, 2021
- By: Gruas Bretones
- in: consejos, Curiosidad, grúas
Tal y como os adelantamos la semana pasada desde Grúas Bretones, por definición las grúas autopropulsadas «son aparatos de elevación de funcionamiento discontinuo destinados a elevar y distribuir en el espacio cargas suspendidas de un gancho o cualquier otro accesorio de aprehensión dotado de medios de propulsión y conducción propios o que formen parte de un conjunto con dichos medios que posibilitan su desplazamiento por vías públicas o terrenos».
De esta forma, hoy os contamos cuáles son las medidas de seguridad para trabajar con una grúa de estas características:
- Siempre ubicar la grúa en superficies en buen estado y horizontales para evitar la inestabilidad y accidentes.
- No se debe permitir el paso de personas mientras la grúa esté en movimiento.
- Se debe tener la señalización necesaria sobre el uso del cinturón de seguridad y sobre los pesos permitidos de las cargas.
- Se debe proteger contra la corrosión todos los elementos metálicos del equipo que se expongan a la intemperie.
- Antes de su puesta en servicio se realizará una revisión de todo el equipo.
- La pluma deberá tener la mayor inclinación posible hacia el suelo, además la carga debe estar lo más cercana posible a la grúa para evitar oscilaciones.
- Al hacer la revisión antes de operar, se deben detectar y rechazar cualquier tipo de cadena en la que su diámetro nominal se haya reducido en más de un 10% por el desgaste o si hay eslabones dañados, gastados o doblados.
- Se debe tener control de presión de aire y estado de neumáticos; control de la fijación del contrapeso.
- Revisar que los ejes están suspendidos; el conjunto giratorio está puesto en el sentido de la marcha y bloqueado, evitando así giros peligrosos.
- La pluma telescópica debe estar completamente retraída y depositada en su soporte.