- 10 septiembre, 2021
- By: Gruas Bretones
- in: Sin categoría
Según la Dirección General de Tráfico en la actualidad circulan por las carreteras españolas más de cien mil conductores con algún tipo de discapacidad. Hay distintos protocolos establecidos que evalúan cada discapacidad para hacer posible la conducción. Así se busca la máxima seguridad del conductor y la del resto de los usuarios de las vías públicas. Por su parte, los fabricantes de coches son capaces de adaptar muchos de sus modelos a las necesidades específicas de cada conductor discapacitado.
Las modificaciones en los coches adaptados para minusválidos, deben adecuarse a la legislación vigente y tan sólo podrán ser realizados por personal autorizado. El automóvil puede ser modificado durante el proceso de fabricación o realizarse posteriormente, lo que supone tener que pasar por la Inspección Técnica de Vehículos para que se pueda comprobar que cumple con la normativa existente en el momento.
Conductores discapacitados: cómo obtener el permiso de conducir
Cualquier persona discapacitada que quiera obtener el permiso debe de cumplir una cierta serie de trámites.
1- Deberán aportar un certificado con la valoración de su discapacidad y con las adaptaciones necesarias para su vehículo.
2- El conductor con discapacidad efectuará las pruebas correspondientes para la obtención del permiso de conducir. En las clases prácticas (y posterior examen) podrá usar un vehículo de su propiedad adaptado, o en caso de no disponer de él, utilizar uno de autoescuela modificado para tal fin.
Permiso de conducir para discapacitados después de accidente o enfermedad
En el caso de tener que adaptar el coche a una minusvalía tras un accidente, o enfermedad, ¿qué se puede hacer?
Los trámites serían parecidos a lo anteriormente descrito, la única diferencia es que el conductor discapacitado tendrá que renovar su permiso para que en el nuevo se vea reflejada su discapacidad y las limitaciones a la conducción. Asimismo deben de constar las modificaciones que son necesarias en su automóvil para adaptarlo a la conducción. Este trámite deberá realizarlo en la Jefatura de Tráfico (aportando el informe médico que le hayan facilitado).
En la Jefatura de Tráfico, una vez comprobadas las limitaciones a la conducción que presenta el automovilista discapacitado, se evaluarán la necesidad de someterle a una prueba práctica. De ser necesaria, la realizarían en conjunto la Comunidad Autónoma y la Jefatura correspondientes.